Sigo teniendo conversaciones y leo artículos acerca de los padres que se están esforzando para tener conocimiento y estar bien informados sobre el uso de la tecnología y los medios de comunicación social. No hay soluciones fáciles. Los padres y los adultos deben buscar información y aprender mas acerca de computadoras, teléfonos, y como se pueden utilizar para el bien y el mal.
Hoy en día los jóvenes están creciendo con las computadoras y teléfonos con tecnología muy avanzada. Ellos son inteligentes y aprenden rápido. Sin embargo, los adolescentes rara vez tienen suficiente experiencia y la sabiduría que se necesita para evitar algunos de los peligros. Hemos oído historias de los jóvenes que han sido manipulados o acosados por otros. Vemos a nuestros niños pegados a sus teléfonos o juegos de video hasta el punto de estar completamente distraídos y sin darse cuenta de lo que esta pasando a su alrededor.
Hay muchos profesionales que están obligados a utilizar todos los medios tecnológicos disponibles con el fin de ser eficaces en su trabajo. También utilizan algunas de esas herramientas para su vida social personal. Sin embargo, algunos de ellos han revelado que toman un "día de descanso" cuando no utilizan la tecnología en lo absoluto. Ellos "ayunan" de la tecnología para poder prestar atención a su salud, sus familias, sus relaciones, etc Estas son las personas que han alcanzado tener éxito no solo en su trabajo, pero también en su vida en general. Han aprendido algo importante. Los padres, los niños y las familias pueden aprender de ellos. Nosotros, también, debemos descansar y permitir que nuestras mentes y cuerpos se recuperaren y restauren de las demandas que tenemos por el constante uso de la tecnología.
"En el séptimo día, Dios descansó." Estamos invitados, incluso es mandato, que tenemos que guardar un día de reposo. Participamos en la misa. Oramos. Jugamos. Prestamos atención a la familia – padres, hermanos, abuelos, primos, etc. Debemos descansar con el fin de que, por la gracia de Dios, podamos estar preparados para vivir una vida santa.
Por lo tanto, les hago una pregunta: ¿por qué no descansar de las cosas que absorben y requieren tanta de nuestra atención – la tecnología? ¿Por qué no descansamos para que podamos nutrirnos en todos los sentidos para estar saludables? Ponga los teléfonos, iPads y tabletas a un lado. Apague las computadoras y los teléfonos. No deje que la tecnología tenga dominio y haga las reglas en su vida. "Ven a mí y yo te daré, descanso," dice el Señor.
Paz, Fr. Andy