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Autor: Aidee Boesen

Principios Para Encontrar la Reconciliación

      “Reconciliación – El amor de Cristo nos  Obliga" es el tema de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos de este año, 18-25 de enero (ver 2 Corintios 5: 14-20).

      Por supuesto, necesitamos orar y trabajar por la unidad de los cristianos durante todo el año. Las oportunidades para acercarnos a nuestras hermanas y hermanos de otras tradiciones cristianas son muchas y necesitamos aprovecharlas.

      2017 marca el 500 aniversario del comienzo de lo que ahora se conoce como la Reforma Protestante. Martín Lutero, un monje alemán, inició la reforma sin pretender crear una división. Hizo una lista de 95 temas sobre las enseñanzas y prácticas que él sentía eran teológicamente malos y/o abusos de poder. Debido a sus preocupaciones con tales enseñanzas y prácticas, llegó a cuestionar la autoridad del Papa.

      Justo en este otoño, el Papa Francisco fue a Suecia y conmemoró el llamado de Lutero para la reforma. Acerca “Del Conflicto a la Comunión”, un documento vaticano, elabora la historia de la reconciliación católica y luterana, los fracasos y los éxitos en el diálogo y en qué dirección debe ir el diálogo en curso.

      El documento concluye con cinco imperativos. El  primero: [en negritas] católicos y luteranos deben comenzar siempre desde la perspectiva de la unidad y no desde el punto de vista de la división para fortalecer lo que se mantiene en común, aunque las diferencias sean más fácilmente vistas y experimentadas. El segundo: los luteranos y los católicos deben dejarse transformar continuamente por el encuentro con el otro y por el testimonio mutuo de la fe. El tercero: los católicos y los luteranos deben volver a comprometerse a buscar la unidad visible, a elaborar juntos lo que esto significa en pasos concretos, y a esforzarse repetidamente por alcanzar esta meta. El cuarto: luteranos y católicos deberían redescubrir conjuntamente el poder del evangelio de Jesucristo para nuestro tiempo. El quinto: los católicos y los luteranos deben ser testigos juntos de la misericordia de Dios en proclamación y servicio al mundo.

      A medida que el Papa Francisco y otros líderes de la iglesia católica y luterana demuestran sabiduría, coraje y humildad al reunirse y hablar respetuosamente unos con otros, nos ofrecen un ejemplo impresionante. Los cinco imperativos contienen dentro de ellos los principios para encontrar la reconciliación (ver frases en negrita) en cualquier grupo o entre dos personas.

      La historia de la lucha, la división y la reconciliación es común, demasiado común. Hagamos historia este año en la vida personal y familiar. Que el amor de Cristo te obligue a reconciliarte.

Pr. Andy