Violencia Doméstica y Respeto a la Vida
Octubre es el Mes de Concientización sobre la Violencia Doméstica y el Mes del Respeto a la Vida. En ambas áreas, que están muy profundamente conectadas, tenemos mucho trabajo por hacer. Debemos llegar a una conciencia más profunda del daño causado por nuestras fallas en el respeto de la vida. También debemos aprender a poner fin a la violencia familiar y a buscar la paz. Dios nos ha creado por amor, y nos ha dado vida y amor para compartir con los demás.
Es importante fortalecer a las familias y ayudar a los jóvenes y a los adultos no tan jóvenes a apreciar su amor mutuo como un regalo de Dios. El amor es un regalo especial. No debe ser manipulado o mal utilizado. El amor no se expresa con palabras o acciones violentas. No hay derecho a ser violento, o envidioso, o posesivo de uno de los cónyuges o seres queridos. Muchos abusadores en casos de violencia doméstica intentan justificar sus acciones diciendo que el otro “merecía” el abuso. Es inhumano y anticristiano pensar y actuar de esta manera.
La violencia en las relaciones abusivas no es normal. Las personas han aprendido este comportamiento anormal. Dado que tal comportamiento se aprende, puede ser desaprendido, o ser reemplazado por una forma más respetuosa de pensar y relacionarse. Esto es lo que se quiere decir cuando decimos: “debemos poner fin al ciclo de violencia”. Estamos diciendo que debemos enseñar y aprender nuevas formas de enfrentar el conflicto y las diferencias de opinión. ¡La violencia nunca está justificada!
Desafortunadamente, tenemos un problema en los Estados Unidos y en el mundo. ¿Sabías que el homicidio es la principal causa de muerte en los Estados Unidos entre las mujeres embarazadas y para las que dieron a luz recientemente? Los investigadores encontraron que las mujeres estadounidenses que están embarazadas, o que estuvieron embarazadas en las seis semanas anteriores (el período posparto), mueren por homicidio a más del doble de la tasa de la que mueren de sangrado o trastornos placentarios, las principales causas de lo que generalmente se clasifican como muertes relacionadas con el embarazo. ¡Tenemos un problema con el respeto a la vida en este país y en el mundo!
Si vamos a cambiar actitudes y creencias sobre la santidad de la vida, por supuesto, debemos hablar de la manipulación, las amenazas de violencia y la comprensión inmadura de las relaciones sexuales y sus consecuencias. ¿Cuáles son las causas fundamentales que las personas citan para buscar abortos? Debemos poner fin a este “ciclo” de mala toma de decisiones. En los cambios a las leyes de aborto en los Estados Unidos no hemos abordado adecuadamente los problemas de raíz que rodean el embarazo inesperado y llamado “no deseado”.
¡Qué obedezcamos al Dios de la vida!
Paz, P. Andy